Trabajando en la calle

Todo comenzó cuando tenía unos 23 años.
Estando parado me ofrecieron un puesto de trabajo en el ayuntamiento de mi pueblo,Torrejón de Ardoz.
El puesto era de barrendero y lo cogí a la primera.
Al principio me costó acostumbrarme a los grandes madrugones y a los largos paseos por las calles pero pronto me acostumbré. A medida que pasaban los años he podido trabajar con camiones y con carritos y escobas.
Tenía dos compañeros con los que echar unas risas en cualquier momento.
Me encontraba agusto,sentía la libertad que me daba la calle. Conocía a la gente, charlaba con todo aquel que necesitaba conversación y era capaz de conocer los horarios de la gente que pasaba por las calles.
Ha sido un trabajo que ha ocupado gran parte de mi vida y con este escrito rindo homenaje a todos los momentos felices que viví en las calles.

Escrito por Goyo